miércoles, 24 de marzo de 2010

Las 7 plagas (Parte 2)

La segunda plaga: Imperialismo

Si  bien los imperios hace tiempo que se disolvieron, en la práctica muchos estados lo practican, pero de una manera mucho más útil que la anterior. Antes debían conquistar territorios para agrandar su imperio, hoy, solo necesitan imponerse económicamente, ya sea por corporaciones o instituciones creadas específicamente con ese fin... Por ejemplo, el FMI, o Fondo Monetario Internacional, está conformado por 182 países, pero solo cinco países (Estados Unidos, Francia, Alemania, Japón y Gran Bretaña) son los que tienen voto, según aporten capital, es decir, la ley del más fuerte y en este  caso, la ley del que más pone. Y sabemos cuánto daño hicieron sus políticas a los países en desarrollo como el nuestro, con la usura internacional, y esto en la realidad se traduce en el padecimiento de millones de personas, que sufren carencias porque unos pocos seres humanos no pueden controlar su ambición, y porque a unos muchos, no les interesa o simplemente  lo ignoran. El Banco Mundial tiene dos países más, aparte de los cinco del FMI,  con voz y voto:  Canadá e Italia. La OMC (Organización Mundial de Comercio) jamás realizo votación alguna, en todas las cuestionables decisiones, como decidir el destino de los agricultores según les parezca, dejando a miles en las calles. Es decir, formalmente, pocos en el mundo deciden el destino económico de muchos, y si te creías libre en esta sociedad, medítalo bien de nuevo, ya que indudablemente tu sueldo depende de esos pocos que se dicen "líderes". Las grandes corporaciones también responden a los conglomerados económicos, por ejemplo las petroleras, inglesas o norteamericanas, ¿o pensaste que era casualidad que fueran conquistados Afganistán e Irak? No es rentable ir a buscar a unos tipos escondiéndose en una montaña (ni creíble), pero si lo es el poseer el  oleoducto que pasa por esa zona y los pozos de petróleo, que convierten al dueño en un gran poder, ya que controla el desarrollo energético de muchos países que dependen de los combustibles fósiles. De paso aprovechan las guerras la venta de armas, o crees que no hay compañías que fabrican y venden armas? 
   Lentamente, las potencias mundiales nos destruyen a todos (mientras somos engañados), luchando por una hegemonía mundial, a costa del sufrimiento del resto del mundo, que somos muchos. Se basan en el sistema económico para tenernos dominados, y así vulneran todas las instituciones que creemos nos representan, como los Estados nacionales, que no pueden pagar deudas con intereses exagerados, y se vuelven eternas. ¿Cómo hacer frente a semejante mal? Simplemente, con las reglas de juego de hoy en día no se puede. Por eso es tan importante la concientización, para que nos levantemos juntos, o pereceremos juntos. No debemos aceptar esta manera de manejarse en el mundo, incorrecta, inmoral y dañina, solo porque la mayoría no diga nada. Si el que calla otorga, prestemos entonces más atención a aquellos que levantan la voz contra este sistema, porque puede que estén en lo correcto, y esperemos que no sea muy tarde para cuando nos demos cuenta...

lunes, 8 de marzo de 2010

Las 7 plagas (Parte 1)

La humanidad sufre hoy de muchos males, originados por su egoísmo, necedad, ambición sin límites, falta de valores éticos y morales, e hipocresía. Por eso pienso nombrarlas, así tal vez juntos, podemos dilucidar el problema, y encontrarle una solución definitiva. 


La primer plaga: Consumismo   


La primer plaga que azota las mentes de la turbada sociedad, es el consumismo, exacerbado por el capitalismo salvaje que hoy en día desconoce fronteras, idiomas, y cualquier tipo de barreras. Mientras algo se pueda vender, no importa nada más. Muchos creerán que ellos no son consumistas, sino que este epíteto puede ser usado únicamente con los grandes millonarios o la "clase alta". Pero no es así, el mundo en general es consumista. ¿Cuántos quieren un auto nuevo modelo, una gran computadora, o lo último en diseño de interiores para su casa? Ni hablar del lujo desmedido que se oferta por televisión, como si para ser alguien en la vida, se necesite vivir en una mansión, o tener cierta cantidad de ropa en el placard. Por supuesto, la mayoría de cosas que hoy la gente compra, ni siquiera las necesita, y peor aún, son perjudiciales para la salud, ya sea mental y/o física del consumidor. Por ejemplo, las modas, tanto en vestimenta como cortes de pelo y vanidades en general, que pretenden que seamos cuasi anoréxicos, y que cambian cada seis meses por lo desagradables que generalmente resultan ser. También podemos hablar de los locales de comida chatarra, que venden justamente, basura para comer, y no hay ciudad en el mundo que no posea un local de esos, y hasta es sinónimo de "progreso". Hoy, algún/a carilindo/a usa una determinada ropa en una película o novela, y ya salen todos a comprarla. Es innegable el papel que tienen los medios, que pretenden hacer que creamos necesitar hasta un masajeador de pies! 
   Pero cuáles son las causas de este consumismo tan arraigado en todo el mundo? Bueno, por supuesto las causas son psicológicas: una persona puede creer que el consumir más es sinónimo de éxito en la vida, o superioridad frente a sus pares, o incluso ligar su identidad a cierto tipo de ropas, libros, bienes materiales. Todo esto es una mentira abismal, ya que somos lo que somos por nuestros méritos propios en la vida, es decir, por lo que elegimos hacer, y la calidad con que lo hacemos. Uno es quién es por sus metas, ideales, logros personales (no materiales), y no por su auto, casa, o peinado. Ser consumista es también juzgar al otro por lo que consume, es decir, por los bienes que posee. Si juzgamos al otro por su ropa, su corte de pelo, y no por su personalidad y su proceder, también somos superfluos y consumistas. Ahora, ¿por qué el consumismo puede ser considerado una plaga? Por dos razones: fomenta la separación e intolerancia de la sociedad, cuando la gente juzga al otro por su capacidad de consumo, algo típico en las "enseñanzas" de la televisión. Y lo peor de todo, es que el consumismo está llevando al mundo a una falta de materias primas, ya que no se basa en el desarrollo sustentable, o el reciclaje, sino todo lo contrario. Un vestido y una computadora son desechados al pasar de moda, y simplemente se tiran! Tarde o temprano, ésto se volverá insostenible, y el mundo tendrá que enfrentar la falta de recursos, y la crisis económica que esto traerá aparejado.

viernes, 5 de marzo de 2010

Mass Media (Parte 2)

¿Miedo o manipulación?

Hoy en día, todo es materia de preocupación. Tenemos miedo a que nos roben o nos maten en la calle, porque tenemos zapatillas nuevas, o a alguien no le gustó nuestra mirada, o nuestra forma de caminar. Tenemos miedo de no conseguir trabajo, o que aumenten los precios. Tenemos miedo a la gripe y a la contaminación. Tenemos miedo a los políticos, que no paran de sorprendernos, para mal, claro. Tenemos miedo a engordar dos kilos, o a no bajarlos. Tenemos miedo, eso es seguro.  
   Pero, como no tener miedo, si eso es lo que siempre vemos en la tele o los diarios. Si no hubo un terremoto, hubo algún ataque terrorista. Y si no es eso, algún país tercermundista quiere adquirir armas nucleares, o la gripe H1N1 se esparce por el mundo, y la economía mundial está en crisis. A veces se descubre un meteorito que puede colisionar con la Tierra, o alguna profecía de Nostradamus y los Mayas es "revelada". Si no nos morimos hoy en la calle por la inseguridad, seguro del 2012 no pasamos. Bueno, si bien es cierto que el mundo está mal, justamente lo que debemos hacer es dejar de tener miedo. Todas las guerras mundiales empezaron con ayuda del miedo, o los judíos querían conquistar al mundo, o los alemanes. Hoy o son los terroristas, o Corea del Norte. El miedo ciega a la humanidad, ya de por sí hipócrita y carente de amor por el prójimo. Muchos presidentes y jefes de estado se llenan las boca de palabras tales como Libertad, Fraternidad, derechos humanos, mientras los países que ellos gobiernan lucran con la venta de armas en guerras organizadas, ya sea en los Balcanes o en Medio Oriente. Claro, pero como nadie sabe donde queda eso, no importa. No importa que muchos mueran en guerras estúpidas, no. Nosotros tenemos problemas más graves, tenemos preocupaciones más importantes. Tenemos que enfrentarnos a los miedos que los medios de comunicación nos imponen, o la sociedad misma, a través de las instituciones que nos enseñan a temer.
   Que las cosas estén mal no debe darnos miedo, sino coraje! Las cosas están como están justamente porque tuvimos miedo, miedo a enfrentarnos a aquellos que nos tienen como ovejas y nos tratan como basura. Miedo a salir a la calle a reclamar lo que por derecho nos corresponde. Miedo a contestar a los que nos humillan, quitándonos hasta las jubilaciones, por la que trabajaron los mayores, nuestros padres y abuelos, toda su vida. El miedo nos paraliza o nos hace estúpidos y prejuiciosos, desconfiados y paranoicos. Por eso, es hora de enfrentar el miedo. Miremos al ser humano que tenemos al lado, y veamos que el también sufre como nosotros, en esta civilización patética, vanidosa y vacía. Seamos valientes, porque las crisis del mundo podrán aumentar, pero lo importante no es que es lo que pueda suceder, sino cómo vamos a enfrentarlo. De nosotros depende que el futuro sea de temer, o esperanzador...